Colonias blanquecinas, de bordes irregulares, que alcanzan el diámetro de 7-8 cm en 14 días a 28ºC en PDA. Inicialmente son ligeramente algodonosas, luego con el tiempo se vuelven polvosas con formación de anillos concéntricos. Reverso amarillento.
Presenta hifas o filamentos septados o tabicados, es decir con “separaciones” a lo largo, hialinos y delgados. Algunas especies presentan clamidoconidios o células de resistencia poliédricos formando cadenas y pigmentados. Presentan macroconidios (tipo de conidio de paredes gruesas y multicelular) fusiformes hialinos con seis septos o bien siete células y paquetes de microconidios pigmentados, que pueden ser en forma de media luna.
Algunas especies producen micotoxinas (como fumonisinas, zearalenonas y tricotecenos) que contaminan los alimentos y que pueden a causar problemas graves de salud cuando el consumo de estos alimentos contaminados es constante.
Otras especies pueden afectar las uñas y causar onicomicosis y otras causar inflamación de la córnea (queratitis) También las hay que son saprofitas (se alimentan de restos vegetales) o parásitas de plantas que pueden afectar cosechas completas (1, 2, 3).
Además, existen especies productoras de metabolitos con diversas actividades tales como antimicrobianas, citotóxicas, nematicidas, antivirales, leishmanicidas (contra protozoario sanguíneo Leishmania sp.) y antioxidantes (3).